Si intentas luchar contra muros humanos te desgastaras.
Si intentas comprender lo incomprensible, perderás tu sagrado tiempo.
Si te miras a través de ellos, te desconocerás.
Si te mantienes cerca esperando que te vean, te quebraras.
Intenta saciarte de lo que verdaderamente vale la pena.
Y sobre todo permítete ser tu mismo siempre, aunque no le gustes al mundo.
Tu eres tu mundo y tienes que ser feliz en el.